Jesús María Silveyra

domingo, diciembre 11, 2011

ESA VOZ



Me atrae esa voz,
que clama en el desierto
y retumba
en el calor del aire
reseco por el viento.

La que se reviste de fuego,
bajo las noches heladas
iluminadas por el cero.
La que trae con el alba,
gotas de fresco rocío
alineadas como perlas.
La que alimenta
los pequeños corazones,
quebrados por la indiferencia.

Esa es tu voz, la mía y la de Juan
que despierta con la boca
rebosando de palabras,
para denunciar la realidad
sin perder la esperanza.


(Poema escrito al amanecer,
después de levantarme,
con los primeros versos
traídos del sueño)
(*) Todos los derechos reservados. © Copyright 2011 Jesús María Silveyra.

No hay comentarios.: